Un día típico

Enciendo la PC, Es el dedo de siempre ejerciendo la misma presión de siempre, no hace ni más frio ni más calor que otros días, no hay alerta meteorológico, ni manchas solares, los perros no aullan, nada que haga suponer que se avecina una catástrofe. Termina el proceso de arranque y en el escritorio, la flechita blanca del ratón se queda inmóvil, clavada, muerta. ¿El teclado? bien, gracias. CTRL+ALT+DEL, nada.

Resignado, inicio el proceso. Apago el módem, espero unos segundos, botón de reset. Se reinicia. Beep beep kaput. Ahora es Scandisk el que se queda colgado. Me mira gris, como siempre, pero no hace nada. Miro las luces. Nada de nada. Botón de reset. Beep beep.

Esta vez, Scandisk no aparece. Mala señal. No importa, espero con la mirada fija mientras uno a uno van apareciendo el escritorio, los iconos, AVG, ZoneAlarm. Aparentemente, todo está en orden pero SÉ que no es así.

Uso el Norton Disk Doctor para escanear errores, sé que va encontrarlos y que si no los arreglo, va a colgarse otra vez. Efectivamente, hay errores, algunos puede arreglarlos, otros no. Empiezan las dudas. Corro el Norton System Check, no hay problemas. Borro los temporales de Windows y los temporales de internet. Miro en la raíz el disco C. Busco lo que no voy a encontrar.

TENGO que hacer que Scandisk se ejecute al inicio para poder continuar tranquilo, la experiencia me ha demostrado que es la única forma. Botón de reset. Esta vez, el proceso es correcto. Todo en orden. Enciendo el módem, espero unos segundos y reinicio Windows. Beep beep. Todo normal pero el AVG no puede conectarse y me cuesta trabajo cerrar la ventana de actualización.

Llega el momento de la paranoia. Actualizo el Ad-Aware y el SpyBlaster, perfecto ¿Debería buscar spywares, virus, bacterias, hongos? Decido que no. Intento actualizar el AVG manualmente y esta vez funciona. Abro Msconfig no sea cosa que ... reviso los procesos en ejecución no sea cosa que ... me quedo un rato mirando la pantalla, respiro hondo y abro el navegador.

Todo parece normal. Reviso mi correo y todo parece normal, más spam que de costumbre pero debe ser por las fiesta de fin de año. Voy a Google y busco cualquier cosa, todo parece normal. Agrego un comentario al blog y todo parece normal. Me pongo a escribir esto y todo parece normal.

Probablemente me quede un rato y luego la apague. Esperaré una hora o más y volveré a encenderla. Con aire despreocupado, usaré el mismo dedo y ejerceré la misma presión, escucharé beep beep y miraré la pantalla de reojo, haciéndome el indiferente. No quiero mostrarle mi temor. La PC, como los animales, huele el temor y se aprovecha.

No haré nada distinto de lo que hago todos los días. No ocurrirá nada distinto de lo que ocurre todos los días. Yo haré lo que se me de la gana y Windows también. Ninguno de los dos le dará explicaciones al otro.

Si la heladera me hiciera lo mismo, la tiraría por el balcón sin dudar un segundo.